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Un año en el ecosistema de Apple

Toda mi vida fui usuario de Microsoft, desde el año 1995 que me compraron mi primer Pentium y le instalé Windows 95 con Microsoft Plus! 95 ¿Quién se acuerda del pinball?

Apple ni siquiera era una opción para mí ya que le pillé mucha manía por los anuncios de “Hola! Soy un Mac, y yo un PC” donde muchos de ellos contaban medias verdades cuando no mentían descaradamente sobre Windows.

Sin embargo, en cierto momento me compré un Ipad que consideré como la mejor opción entre las tablets que había en ese momento y luego llegó el Iphone, los Airpods e incluso un Apple Watch para monitorizar mi actividad física.

El año pasado, en el verano de 2021, con prácticamente todo lo que había sacado Apple al mercado, empecé a tener curiosidad sobre los Macbooks, que eran ligeros y tenían una batería increíble, lo cual me venía genial ya que estaba viviendo como nómada digital y no quería llevar encima cosas demasiado pesadas.

Al principio me costó adaptarme. En la práctica, MacOS no es muy diferente a un sistema Windows, pero recuerdo que me costó acostumbrarme al manejo de ventanas, a como se instalaban las aplicaciones y un sinfín de pequeños cambios que me hacían sentir incómodo.

Excel no tenía todo el potencial que te da VBA para crear macros y aplicaciones en Windows, Outlook no sincronizaba con el calendario y los contactos del sistema y ni siquiera tenemos Access.

¿Y por qué sigo en MacOS?

Poco a poco me fui adaptando y empecé a ver las ventajas del ecosistema de Apple, cosas que en Windows no tienes, como poder copiar algo en el portapapeles de un dispositivo y pegarlo en otro, usar la cámara del Iphone como webcam en tu Macbook…

ICloud aunque tiene sus defectos, también te permite compartir archivos fácilmente entre dispositivos y aplicaciones.

Al final te das cuenta de que todo está como mejor diseñado y que te facilita el trabajo y las tareas cotidianas, y eso cuando te acostumbras, es difícil dejarlo de lado.

El ecosistema de Apple

La verdad es que no es perfecto. Sigue habiendo muchos programas y juegos que no puedo instalar, además de que yo tengo la versión M1 lo cual no me permite virtualizar sistemas basados en arquitectura Intel y era algo que usaba mucho.

Mi biblioteca de Steam cuenta con unos 1300 juegos de los cuales solo puedo jugar a 240 y aunque pudiese instalarlos todos, los MacBooks no son ordenadores diseñados para jugar juegos potentes.

También mucha gente piensa que un Macbook no falla, lo cual es mentira… A mí me falla tanto o más que Windows 10, a pesar de que se supone que teniendo un hardware cerrado tendría que ser más estable.

Y otra cosa que la gente está muy equivocada es sobre el Malware, pensando que en MacOS y Linux no existe… Cuando la realidad es que si hay. De hecho, hay antivirus en estos sistemas por ese motivo.

Que la cantidad de Malware sea superior en Windows es solo una cuestión de estadísticas

Que un 80% de los ordenadores tengan Windows hace que la mayoría de Malware se diseñe para Windows, pero sigue habiendo Malware en todas las plataformas.

Finalmente, el precio es posiblemente el motivo que más me alejaba de comprarme hardware de Apple. Si bien ahora lo acepto y puedo entender mejor por qué los dispositivos de Apple cuestan lo que cuestan, es algo que hace 10 años me costaba mucho más aceptar.

La visión de Jobs

No creo que nadie pueda negar que Apple es lo que es gracias a Steve Jobs aunque normalmente se le atribuye todo el éxito, olvidándose de que los primeros ordenadores Apple fueron proyectos de Steve Wozniak, pero es algo para hablar otro día.

Yo diría que Jobs fue un visionario que se imaginó la integración de la electrónica con el ser humano corriente, cuando el resto del planeta solo podían pensar en la aplicación empresarial.

Lo cierto es que los años 70 y 80 fueron unas décadas interesantes llena de visionarios: Steve Jobs con Apple, Bill Gates con Microsoft, Nolan Bushnell con Atari y Linus Torvalds con Linux, entre otros…

Steve Jobs y Steve Wozniak fundaron Apple en el año 1976.

Volver a Windows

Como os decía, llevo ya un año usando MacOS a diario, pero como no puedo jugar videojuegos decidí comprarme un portátil Windows con una gráfica RTX 3070 y combinarlos.

Al principio bien, pero como estos últimos años he estado viviendo en hoteles, me surgió un problema y era que o llevaba siempre conmigo los dos portátiles o me arriesgaba a dejar el portátil gamer en la habitación, arriesgándome a que me lo robasen. Sometimes happens :S

Lo cierto que estuve así unos meses, llevando en mi mochila unos 25kg a todos lados donde iba, pero llegó un momento que me cansé y decidí deshacerme de uno de los dos portátiles.

Todo me indicaba que la mejor opción era quedarme con el portátil gamer. Era más potente, podía jugar con él, podía tener todo el software que necesitaba para trabajar e incluso más barato ya que en MacOS todo lo que uso va con licencias de pago anuales.

Sin embargo, empecé a utilizar Windows de nuevo y no me sentía cómodo. Me había acostumbrado al Mac y al ecosistema de Apple así que terminé deshaciéndome del portátil gamer y ahora os escribo desde mi preciado Mac sin haberme arrepentido de esa decisión.

Y esto es todo lo que os puedo comentar sobre mi incursión en el mundo de Apple. Para mí ya es tarde, pero vosotros quizás tengáis aún una oportunidad…

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